Justificaciones

Entramos en temas delicados. Hace casi tres años, el 6 de enero del 2008 fueron detenidos en las inmediaciones de Mondragón los dos etarras Portu y Sarasola, acusados de perpetrar el atentado de la T4 de Barajas, saldado con dos víctimas. Tiempo después de ésta detención, los dos detenidos presentaron una denuncia por torturas y brutalidad policial ante la Audiencia de Guipuzcoa, y en el día de hoy ha dado comienzo el juicio en contra de los guardias civiles que llevaron a cabo la detención.

Y como relata la agencia EFE, los forenses del equipo del Instituto de Medicina Legal de Gipuzkoa que elaboraron un informe sobre las lesiones de Portu y Sarasola han opinado hoy que las heridas más graves de los etarras no son compatibles con la versión ofrecida por los guardias civiles que los detuvieron. Segun los agentes, las heridas de ambos etarras eran consecuencia de su enérgica detención ya que intentaron escapar y tuvieron que ser reducidos con violencia, y de momento claro ha quedado que lo dicho por los citados agentes es mentira.

Haciendo referencia al artículo de EFE "el especialista ha precisado que esta lesión era de «riesgo vital» para el terrorista si no hubiera recibido tratamiento médico «urgente» y ha añadido que la forense que le trató en aquel momento quedó "impresionada" por el estado en el que se encontraba el etarra".

Visto esto, y a la espera de lo que pase de aqui hasta que el final el juicio, creo que es hora de reflexionar. ¿Es lícita la brutalidad policial en casos como éste? Y lo más importante, el hecho de que el detenido sea terrorista ¿justifica las torturas por medio de agresiones, físicas o emocionales?

Yo lo veo claro. El terrorista es merecedor de pena de cárcel por los actos que ha cometido, pero si cualquier fuerza policial hace abuso del poder para propinarleestas vergonzosas palizas, vulnerando los Derechos Humanos y toda ética y moral, es merecedora de un castigo ejemplar. Y a diferencia de lo que muchos piensan, no todo vale.